De la industria extractiva a la economía del conocimiento. De la cementera al Distrito de Innovación.

El proyecto tiene la ambición de convertirse en referente mundial como núcleo estratégico de las industrias del conocimiento y la innovación, respetando el patrimonio industrial de Vallcarca y dotándolo de un nuevo valor, al tiempo que se convierte en un nuevo motor económico para el Área Metropolitana de Barcelona.

Con una inversión prevista superior a 440 millones de euros, la regeneración de la antigua colonia Industrial pretende convertir la zona en un Distrito de Innovación impulsado por la actividad económica de alto valor añadido vinculada al conocimiento, especialmente del sector audiovisual y de las TIC, a imagen y semejanza de otros distritos de innovación europeos y del propio 22@ de Barcelona: basados en la mezcla de usos productivos, residenciales, comerciales y con equipamientos públicos culturales, educativos, deportivos y de ocio.

Un lugar donde poder vivir, trabajar y disfrutar.

LIVE /

WORK /

ENJOY /

LIVE / WORK / ENJOY /

Los tres pilares en que se basa el proyecto son:

El nuevo desarrollo ocuparía solo en torno a 16 hectáreas del suelo urbano industrial actual, que comprende una superficie total de 49 hectáreas (20 de ellas dedicadas a la actividad cementera, aún en funcionamiento), quedando el resto repartido entre zonas verdes y espacios abiertos en suelo urbano, y la zona desclasificada para pasar a ser parte del Parc del Garraf y de las infraestructuras necesarias.

Así pues, Vallcarca se convertiría en el nuevo motor económico de la comarca, además de un referente en el Área Metropolitana de Barcelona: supondría la transformación de la superficie ocupada por la industria en actividades intensivas en conocimiento e innovación; liberaría de presión a Barcelona con un nuevo núcleo de actividad económica al sur de la ciudad, en el Garraf; conectaría con los principales núcleos urbanos y de actividad económica; y promocionaría la identidad y el sentido de pertenencia mediante la puesta en valor del entorno natural, el patrimonio industrial y la memoria del lugar.

Como estrategia arquitectónica, se elabora un estudio de las edificaciones actuales de la cementera para identificar cuáles son susceptibles de ser rehabilitadas y acoger nuevos usos. La estrategia consiste en desvestir estos edificios, vaciándolos de hormigón y manteniendo su estructura para dotarlos de nuevas funciones. De esta manera, se pone en valor el patrimonio industrial y se mantiene la identidad del lugar.